P E D I R

1. Cuando se invoca una ayuda dirigida al ser supremo, es necesario tener un cuidado muy extremo. 2. Sea cual fuere la creencia en materia religiosa, resulta irrespetuoso pedir a Dios cualquier cosa. 3. Para lograr un deseo la Fe es poderoso aliado. Porque ayuda en el esfuerzo para lograr lo anhelado. 4. Pero es harto conducente no caer en el abuso creyendo que del buen Dios se puede hacer cualquier uso. 5. Es lícito moralmente solicitar la salud para que algún ser querido no caiga en el ataud. 6. Es también muy comprensible que quien cayó en la indigencia solicite alimentos en pro de su existencia. 7. Es natural que el sin techo le pida a Dios que lo atienda para lograr que lo ayude a tener una vivienda. 8. No es admisible caer en pedido poco serio. Porque hay que suponer que Dios posee criterio. 9. Y a pesar que es poseedor de una infinita bondad, no podemos pretender que admita una necedad. 10. Es absurdo que lo invoque desde suntuosa mansión, alguien con lujoso auto y particular avión. 11. No pide casa y comida. Lo que pide es disparate. Pretende que Dios le otorgue la posesión de un gran yate. 12 .Otro absurdo petitorio es pedirle al señor que en alguna lotería nos toque el premio mayor. 13. Otra cosa inconcebible: Que el que concurre a un casino en el que ha ganado bastante, pida el auxilio divino. 14. Por eso es conveniente pedir algo razonable. Que por su naturaleza sea por Dios aceptable. 15. Muy ocupado está Dios remediando estrecheces. No pretendamos tanbién que atienda estupideces. ALDO B VENTURA