por amor y respeto hacia el vocablo.
Este tema tal métrica merece.
Aquí hoy del amor es de lo que hablo.
La gama del amor es muy variada.
Si acudimos al libro de dicciones
veremos que de amor hay muchas clases.
Del vocablo hay diversas acepciones.
El amor es sinónimo de afecto.
Cual "cariño" se suele utilizar.
Las dicciones "amor" "cariño" "afecto"
suelen usarse para matizar.
Algunos lo confunden con "afecto"
y otros lo confunden con "cariño".
El amor profesado es diferente
si se trata de adulto o de un niño.
El amor es pasión arrolladora.
Alcanzan a veces tal intensidad
que suele entregarse a ella el ser viviente
con desmedro de su seguridad.
Así vemos en hombres y animales
que del peligro pierden la noción.
Padecer suelen graves consecuencias
por entregarse a su sexual pasión.
Es brutal tiranía que esclaviza.
Para muchos "amor" es la pasión
-provista por natura generosa-
que les niega su humana condición.
Recordemos aquí a otro amor.
Cuando castiga a tierna criatura
un padre afectuoso que corrige,
lo hace con amor que es blandura.
Asimismo de "amor" se califica
cuando se pone esmero en la labor.
Al trabajar con aire complacido
y obtener del trabajo buen sabor.
Otra clase de amor es "amor lesbio".
Amor homosexual entre mujeres.
Era Lesbos en Hélade antigua
donde nacieron dichos menesteres.
Otro amor conocido es el "propio".
Es útil si el nivel es adecuado.
Mas suele transformarse en defecto
al alcanzar nivel exagerado.
De aquí pasamos al "amor al arte".
Si se trabaja toda una jornada
sin que se tenga obligación alguna
y al final de su labor no cobra nada.
También se usa la dicción "amor"
en "Por amor de Dios" que es expresión
que con gran humildad se solicita
para lograr merced o algún perdón.
Y por este sendero hemos llagado
a un modismo que incluye gran error.
Se dice en el lenguaje popular
"Esta noche contigo haré el amor".
Porque hacer el amor es otra cosa.
Es la acción de enamorar a una dama
con esmero, lisonja y sutileza,
aunque el real motivo sea la cama.
Existe del vocablo otra acepción.
Con ella se define al amor.
Cuando se mezcla carne enardecida
y el espíritu en todo su esplendor.
Si ese estado resulta duradero,
si alcanza a ser perenne ese afecto,
podremos definir de esta manera
lo que será sin duda amor "perfecto".
Aldo Ventura
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