viernes, 28 de diciembre de 2012

T R A S C E N D E R

1. Es lograr que nuestro nombre -a veces con mucho apuro-
   conocido sea hoy y también en el futuro.
2. También se logra a disgusto cuando conoce la gente
   -enterada por los medios- el nombre de un delincuente.
3. En general el humano sabe breve su existencia.
   Y desea perdurar más allá de su presencia.
4. Sobretodo si es artista o aunque sólo literato,
   suele desear que su obra perdure un buen largo rato.
5. Por supuesto que no advierte lo breve de la memoria
   que para estas cuestiones suele demostrar la historia.
6.  El olvido llegará.  En un año, en un decenio, 
   tal vez en un centenario o quizá en un milenio.
7. El deseo de trascender lo obliga a divulgar
   por doquier su obra y nombre.  Trata de hacerse notar.
8. Hay otros cuya soberbia les impide divulgar.
   Aunque no se los divulgue "su obra ha de perdurar".
9. Sigo hablando de escritores.  Hay un grupo que es menor,
   que no quiere trascender.  Y no por creerse mejor.
10. Sólo escriben para ellos.  Y en lugar de divulgar
   entretienen con su obra sólo al grupo familiar.
11. Otros son profesionales.  Crematístico motivo
    suele ser al escribir el mencionado adjetivo.
12. También existe otro grupo que escribe por vanidad.
   Y publican porque pueden aunque no haya calidad.
13. Para mí merece el nombre realmente de "escritor"
   quien siente necesidad de hacerlo con gran rigor.
14. A los poco conocidos que fama quieran tener,
   dedico esta reflexiones:  "Manual para Trascender".
15. Como a mí no me interesa no lo tengo registrado.
   Que lo utilice quien quiera sin sentirse a mí obligado.
16. Puede llegar cualquier obra en el tiempo a perdurar.
   Hacen falta periodistas que la sepan publicar.
17. Y con visión de futuro en un paso posterior,
   es útil simpatizar con algún historiador.
18.  Mas volvamos al presente.  Buscar en el periodismo
   a un señor periodista que acepte un trato ya mismo.
19. Y aquí se produce el canje.  Intercambio de favores.
   Se ensalza la obra escrita sin que sea de las mejores.
20. A cambio el interesado retribuye con dinero
   esa nota publicada alabada con esmero.
21. Algunas veces el canje se hace en forma especial.
   En esos casos existe un motivo corporal.
22. Se necesita también  recorrer las redacciones.
   Es obvio averiguar cuales son sus direcciones.
23. Es útil agasajar al crítico o periodista.
   Averiguar sutilmente quien debe integrar la lista.
24. Intentar intervenir en los programas radiales.
   Por supuesto no olvidar atenciones especiales.
25. Tratar de poder meterse un poco en televisión.
   Obviamente cuesta más el optar por esta opción.
26. Claro que hay periodistas que ejercen su profesión
   con honestidad, conciencia, dignas de admiración.
27. Pero por lo general, es mejor el comentario
   cuando hay retribución salida de nuestro erario.
28. Lo que antecede no es experiencia personal.
   Porque nunca he intentado aprovechar ese mal.
29. Pero pude comprobar que al que quiere trascender,
   puede ser de utilidad ese método ejercer.
30. No puedo olvidar aquí la existencia de escritores
   que de ningún periodista necesitan sus favores. 
31. Son los llamados "fantasmas".  Escritores de medida.
   Que escriben para quien paga una escritura pedida.
32. Desde artículo cualquiera hasta una obra teatral.
   Y a veces son responsables de algún discurso oficial.
33. Les ruego se me disculpe si padecí omisión.
   trataré de subsanarlo en la próxima edición.
34. Sin embargo no me iré sin dejar de mencionar
   algo que es muy importante si se quiere perdurar.
35. Si se quiere trascender es elemento valioso,
   el apoyo de algún grupo, político o religioso.

       ALDO B VENTURA
   
   

sábado, 22 de diciembre de 2012

LETRAS DE TANGO

1. Muchos autores de tango han tratado a la mujer
   en forma tal vez injusta.  Yo la quiero defender.
2. De percantas y traidoras está lleno el repertorio.
   Por lo visto en Buenos Aires no existía Juan Tenorio.
3. Y en cada letra tanguera era la mujer culpable
  de dejar plantado al hombre de manera poco amable.
4. Es permanente la queja del varón abandonado.
  Habría que averiguar  por qué lo han amurado.
5. El fuelle o la guitarra consolaban al herido.
  Que se quejaba cantando por el ultraje sufrido.
6. Tuvieron siempre ocasión de hablar mal de sus mujeres.
  Pero no hay letra que cuente que olvidaron sus deberes.
7. Son historias parecidas.  Se asemejan entre sí.
  La campana femenina quiero que escuchen aquí.
8. El asunto comenzaba al enganchar a la mina.
  Un pantalón a rayitas, un saco de gabardina...
9. ...un funyi color gris perla, los zapatos con taquito,
  un lengue de seda blanca y en el cinto un cuchillito.
10. ¿Quién se iba a resistir con esa pinta, mi Dios?
  ¡A la casa y a los padres ellas decían "Adiós"!
11. Fuertemente enamoradas se seguía al varón
  y  les parecía un lujo la pieza de la pensión.
12. La guitarra en el ropero, dos sillas, una mesita,
  un brasero, mosquitero y debajo, la camita.
13. Ese era el nido de amor que a ellas les bastaba.
  Si su hombre las quería ¡todo lo demás sobraba!
14. Pero solía ocurrir que a los quince o veinte días,
  las amables relaciones se ponían algo frías...
15. En la cara del varón. la baja temperatura
  provocaba variación:  ¡se le ponía algo dura!
16. Con todo caradurismo se iba a juntar con su barra.
 "-Si tenés hambre, mujer. bajá uva de la parra!"
17. Desaparecía el hombre y la pobre enamorada
  le pedía a una vecina algo de yerba cebada.
18. Era la primera etapa. Al compás de cualquier tango
  poco después le insinuaba ¡que ella consiguiese el mango!
19. Era lógico y normal que la mujer ofendida
   como revancha buscase algo mejor en su vida.
20. ¡En buena ley lo plantaba!  Una promesa incumplida,
   un varón que no lo era, una novela concluída.
21. Y se mandaba mudar la ultrajada mujer.
   Ante la actitud del hombre ¿qué otra cosa podía hacer?
22. Al fallar fiero el amor negándole la comida,
   era normal que buscase otro nido, otra guarida.
23. En lugar de silenciar el varón abandonado,
   la raíz de aquel problema que por él fue originado...
24. ...lanzaba al viento su queja ofendiendo  a su ex mujer.
   Pero no se daba cuenta que con ese proceder...
25. ...a la mujer difamaba, pero con grande torpeza.
   Pues esa clase de injuria ¡Coronaba su cabeza!

       ALDO B VENTURA

viernes, 14 de diciembre de 2012

F A R A N D U L A

1. Sólo por curiosidad quise saber el motivo
  porque se tiene al vocablo por vocablo despectivo.
2. Esta dicción escuché en más de una ocasión.
  Manejé muchos actores debido a mi profesión.
3. Y les oí muchas veces criticar a un compañero,
  tildando al criticado de ser un farandulero.
4. Aquel que más criticaba casi siempre era un actor
  que sin duda se creía, ser de ellos el mejor.
5. La dicción menospreciante tuvo un sentido primario.
  Para indagar el origen acudí al diccionario.
6. "Farándula" allí dice -al menos así fue antes-
  que se aplicaba a un grupo con profesión de farsantes.
7. De esto hay dos acepciones.  La primera es comediante.
  Pero tengamos en cuenta la segunda de "farsante".
8. Según esta es "farsante" el individuo que miente
  al tratar de aparentar lo que en realidad no siente.
9. Vemos que el término "actor"  desde muy antigua data,
  para el grueso de la gente era profesión ingrata.
10. Y era el farandulero no sólo un comediante.
  También era trapacero y por supuesto farsante.
11. Trapacero es aquel que con audacia evidente,
  con mentira y falsedad suele engañar a la gente.
12.  El rosario de "virtudes" que le endilgaba la gente,
  adornaron al actor hasta casi en el presente.
13. Pues hasta el siglo pasado, en la mejor sociedad
  se miraba al actor con alguna frialdad.
14. Si un hijo de la familia insinuaba ser actor,
  trataban de encaminarlo por un camino mejor.
15. La situación ha cambiado.  Hay actores bien pagados
  y hoy la familia cree que están bien encaminados.
16. Pero hay un grupo de actores que no son muy bien mirados.
  Ellos son faranduleros y son muy publicitados.
17. No importa la calidad profesional, su histrionismo.
  Sea buen o mal actor en realidad da lo mismo.
18. Lo importante es figurar en reuniones destacadas.
  Y escándalos ventilar sobre sus vidas privadas.
19. Si se trata de mujeres es normal la desnudez.
  Y no por casualidad se ve una y otra vez.
20. No hay artística intención.  Pues la desnudez se exhibe
  con vulgar procacidad hasta donde se concibe.
21.  Y estos faranduleros alimentan en exceso,
  a programas realizados con evidente buen seso.
22. Pues consiste el buen seso, en contar con la presencia
  de gente publicitada que incremente la audiencia.
23. Este tipo de actores -son "actores" porque actúan-
  logran fama discutible por acciones que efectúan.
24. Y son más bien apreciados por su vida personal
  que por calidad mostrada a  nivel profesional.
25. Goza de muy buena prensa el grupo farandulero.
  Pues el público lector lo deglute con esmero.
26. Los actuales herederos de la farándula antigua,
  han heredado la fama en calidad algo exigua.
27. Pero están muy bien pagados, figuran en las revistas,
  fabrican publicidad y conceden entrevistas.
28. Hay actores de nivel que expresan su desagrado 
  por todo farandulero por la fama consagrado.
29. Pero al farandulero esa opinión no le importa.
  No rebaja la porción que le toca de la torta.
30. En el artístico ambiente hay gente con mala fama.
  Es un grupo reducido que "Farándula" se llama.

      ALDO B VENTURA 

viernes, 7 de diciembre de 2012

CINE Y SENSIBILIDAD

1. Mi trabajo es hacer cine.  Y me intereso, además,
   en ver cómo lo reciben en la sala los demás.
2. Hablo en general del cine.  Es fenómeno social
   que interesa a grande y chico.  A todo ser por igual.
3. Lo que se ve en la pantalla causa en el espectador
   reacciones muy diferentes, de muy diverso tenor.
4. Y al ver una misma escena hay quien queda impasible.
   Y otro se anega en llanto. ¿Será por ser muy sensible?
5. En general, el mayor parece el más afectado.
   En cambio queda impasible el joven que está a su lado.
6. ¿Por qué llora más el viejo?  ¿Labilidad emocional?
   ¿Es que está reblandecido porque lo aqueja algún mal?
7. Esto no es patología.  No es menester mucha ciencia.
   Es que entre joven y viejo existe gran diferencia.
8. Muchos viejos han sufrido a través de su existencia,
   situaciones dolorosas que recuerdan con frecuencia.
9. Y al contemplar en pantalla situación muy parecida,
   no lloran por lo que ven.  Lloran por la ya sufrida.
10. En el caso juvenil por razón de corta edad,
   aún no han vislumbrado de la vida la fealdad.
11. Si el joven es conmovido ocultará su emoción.
   Por temor que se lo crea insuficiente varón.
12. Además el viejo llora sus presentes frustraciones.
   Pues ya no existe futuro para sus aspiraciones.
13. Yo rara vez voy al cine. Lo veo en televisor.
   Para apreciar lo exhibido hacerlo solo es mejor.
14. Del público los ruiditos distraen mucho mi atención.
   Y dificultan bastante mi cabal apreciación.
15. Hace algún tiempo fui al cine. Me tocó estar sentado,
   viendo el drama que se daba, con una dama a mi lado.
16. El tema era muy simple. Un amor muy sostenido
   fue quebrado de improviso por la muerte del marido.
17. Esta mujer ubicada en la butaca de al lado,
   ocultaba en su pañuelo su llanto desconsolado.
18. Al tornar la luz de sala le comenté a la mujer:
   -Señora, es usted sensible por lo que acabo de ver...
19. Ésto a usted le causa daño...Ver ésto con emoción...
   Tenga en cuenta que en el cine casi todo es ficción...
20. Me miró serenamente. Dijo -No encuentro reposo.
   Hace sólo un par de meses que he perdido a mi esposo.

      ALDO B VENTURA